
“Debemos ver en ellos la imagen de Cristo quien declaró en la
parábola del juicio final: ‘era forastero y me hospedaron’ (Mt 25,33)”,
asentó.
El mitrado expuso que como miembros de la Iglesia, deben ser
solidarios con ellos y “ofrecerles desde nuestra pobreza, comida, agua,
vestido, techo”, pero también, “calor humano, amistad, confianza,
aliento y esperanza. Y sobre todo, “nuestra oración”, asentó.
Convocó a los párrocos de los lugares por donde transitará la
caravana, organizar a sus comunidades –coordinados con los responsables
diocesanos de la Pastoral Social y de la Pastoral de Migrantes–, para
que se realicen acciones de solidaridad en su favor.
De igual manera, requirió a las autoridades que garanticen su
seguridad, “que no impidan, mediante el uso de la fuerza policial, su
libre tránsito por territorio nacional y que se respeten sus derechos”.
Llegarán en cuatro días
El responsable de la Pastoral de Migrantes de la Diócesis de
Tehuantepec, Ranulfo Pacheco López dijo que la caravana de 7 mil 500
migrantes –entre estos, 2 mil 500 niños–, salió ayer a las 11 de la
mañana de Tapachula, Chiapas, con rumbo a Oaxaca.
Ls centroamericanos podrían arribar en tres o cuatro días a San Pedro
Tapanatepec, después de cruzar el territorio de Chiapas, para después
dirigirse a La Ventosa y posteriormente a Matías Romero.
Subrayó que la caravana migrante se dirigirá a continuación a
Tuxtepec y de ahí a Tierra Blanca, Veracruz, para después pasar por
Puebla, Tlaxcala y Estado de México, rumbo al centro y norte del país.
Aunque observó que los centroamericanos quizá también puedan tomar otra ruta y de Matías Romero, dirigirse a Acayucan, Veracruz.
E incluso, mencionó que la caravana migrante también podría ir a
Ciudad Ixtepec, donde se encuentra el albergue “Hermanos en el Camino”,
para descansar algunos días.
Resaltó que las parroquias y el pueblo católico se están preparando
para recibir a los centroamericanos “con mucho amor y cariño”, pero
también, “con fe, como seguidores de Jesús”.
De este modo, convocó a los fieles a hacer colectas de víveres, agua,
pomadas para los pies y material de curación, para atender a los
participantes de la caravana.
El también párroco del Señor de Esquipulas de Juchitán de Zaragoza,
dijo que la Iglesia Católica se coordinará con los gobiernos federal y
estatal, por ser los primeros responsables de la seguridad y estancia de
los centroamericanos.
fuente nvinoticias